¿Pueden las finanzas regenerativas redefinir el valor económico en la región ?
- Walter Rivera
- hace 6 horas
- 2 Min. de lectura
En un momento en que la región enfrenta simultáneamente desafíos climáticos, desigualdades estructurales y vulnerabilidad económica, surge una pregunta crucial: ¿es posible repensar el sistema financiero para que no solo extraiga valor, sino que lo regenere?

(M&T)-.Las finanzas regenerativas ofrecen una respuesta afirmativa y transformadora.Este enfoque financiero busca restaurar ecosistemas, fortalecer comunidades y crear resiliencia, mientras genera retornos económicos.
A diferencia de las finanzas tradicionales, que priorizan la maximización del retorno a corto plazo, las finanzas regenerativas están diseñadas para trabajar en armonía con los sistemas vivos. Su lógica se inspira en los principios de la ecología, la equidad y la circularidad económica.Las finanzas regenerativas invierten en procesos que devuelven más valor del que extraen, tanto en lo ambiental como en lo social.
En Centroamérica, esta visión empieza a tomar forma en sectores como la agricultura regenerativa, los bonos de impacto ambiental, los fideicomisos de cuencas hídricas y los fondos comunitarios de energía solar. Iniciativas en Guatemala, Costa Rica y Honduras han demostrado que es posible generar ingresos mientras se restauran suelos, se capturan emisiones y se empodera a comunidades.Ejemplos locales ya muestran que las finanzas regenerativas pueden ser motor de desarrollo y conservación al mismo tiempo.
Una de sus características más innovadoras es el enfoque en resultados sistémicos. En lugar de evaluar únicamente la rentabilidad financiera, se miden indicadores como la biodiversidad, el acceso equitativo a servicios, la salud del suelo o la cohesión social.El éxito de un proyecto regenerativo se mide por su impacto positivo en múltiples dimensiones, no solo por su utilidad monetaria.
No obstante, este modelo enfrenta barreras importantes: falta de educación financiera con enfoque regenerativo, marcos regulatorios rígidos, escasez de instrumentos de inversión adecuados y la persistencia de una visión cortoplacista del desarrollo.La transición hacia finanzas regenerativas exige cambios culturales, institucionales y educativos profundos.
Instituciones multilaterales, fondos de inversión y bancos de desarrollo están comenzando a interesarse por este enfoque en América Latina. Algunos bancos éticos en Europa incluso han creado líneas específicas para proyectos regenerativos en el Sur Global.La apertura de capital internacional hacia este modelo representa una oportunidad para Centroamérica de atraer inversión transformadora.
Más allá de una tendencia, las finanzas regenerativas podrían convertirse en el nuevo paradigma de desarrollo económico para el siglo XXI. En una región con alta vulnerabilidad climática y potencial ecológico, integrar este enfoque podría ser la clave para un futuro más justo, resiliente y sostenible. Las finanzas regenerativas no solo reformulan cómo se invierte, sino también por qué y para quién se invierte.
Comments