Friendshoring estratégico: La oportunidad que transforma a la región
- Walter Rivera
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El reordenamiento del comercio internacional avanza más rápido de lo previsto. Tensiones geopolíticas, barreras arancelarias y la búsqueda de cadenas de suministro más confiables han impulsado a Estados Unidos, Europa y Asia a fortalecer alianzas con países considerados socios “seguros”. En este contexto, América Latina emerge como un territorio clave para el friendshoring, una estrategia que promete atraer inversión, diversificar exportaciones y reposicionar a la región dentro del mapa mundial.

(M&T)-. De acuerdo con la CEPAL, el friendshoring se ha convertido en una de las tendencias más influyentes para el comercio global entre 2024 y 2026, impulsando una relocalización parcial de industrias y la creación de nuevos corredores logísticos. Para la región, la oportunidad radica en ofrecer estabilidad, capacidades industriales, talento especializado y cercanía estratégica con mercados de alto consumo.
Países como México, Costa Rica, República Dominicana y Colombia ya están captando inversiones orientadas a manufactura avanzada, electrónica, dispositivos médicos, servicios digitales y energías limpias. Según datos del Banco Interamericano de Desarrollo, cerca del 15 por ciento de las empresas estadounidenses evalúan trasladar parte de su producción hacia América Latina en los próximos años para reducir riesgos asociados a Asia y optimizar tiempos logísticos.
Este fenómeno no solo beneficia al sector industrial. También abre puertas para que pymes, exportadores de nicho, proveedores de tecnología y operadores logísticos se integren a cadenas de valor más sofisticadas. La clave estará en fortalecer infraestructura, mejorar la eficiencia portuaria y avanzar en políticas que faciliten comercio, inversión y certificaciones internacionales.
Desafíos para consolidar la oportunidad
Aunque el friendshoring ofrece un escenario favorable, su éxito depende de condiciones internas que aún requieren mejoras. Estudios de McKinsey y del World Economic Forum señalan que la región debe enfrentar brechas en digitalización, costos energéticos, seguridad jurídica y tiempo de trámites aduaneros. Estos factores determinan si la relocalización se convierte en una oportunidad real o se desplaza hacia otros mercados emergentes.
Para aprovechar esta transformación global, los países latinoamericanos deberán fortalecer alianzas, modernizar políticas de promoción comercial y acelerar inversiones en talento especializado. El friendshoring no es solo una tendencia; es una reconfiguración estructural de cómo y desde dónde se produce en el mundo.
A medida que avanzamos hacia 2026, las empresas que se adapten a esta lógica de alianzas estratégicas y cadenas seguras podrán diversificar su presencia internacional y competir con mayor resiliencia en mercados cada vez más exigentes.





