Eye tracking y neurodatos lideran la nueva publicidad
- Walter Rivera
- hace 4 minutos
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La relación entre consumidores y marcas está entrando en una etapa más profunda y precisa. El neuromarketing aplicado se ha consolidado como una herramienta capaz de revelar qué sienten las personas cuando ven un anuncio, interactúan con un producto o navegan en una plataforma digital.

(M&T)-. Esta disciplina combina neurociencia, tecnología avanzada y análisis conductual para comprender respuestas emocionales que los métodos tradicionales no pueden capturar.
Según el informe State of Consumer Neuroscience de Nielsen, más del 65 por ciento de las grandes marcas globales ya utiliza herramientas de neuromarketing para optimizar campañas, mejorar la experiencia del cliente y diseñar estrategias más efectivas. En América Latina, el interés crece impulsado por la necesidad de crear mensajes más auténticos y menos saturados.
El neuromarketing aplicado utiliza tecnologías como eye tracking, medición de ondas cerebrales, respuesta galvánica de la piel y análisis facial para identificar patrones de atención, impacto emocional y recordación. Estos datos permiten construir campañas que conectan con la audiencia a un nivel más profundo y natural.
Estudios del Harvard Business Review indican que las decisiones de compra están influenciadas en más del 80 por ciento por factores emocionales. Comprender estas respuestas en tiempo real permite a las marcas ajustar elementos visuales, narrativos y sensoriales antes de lanzar un producto o campaña al mercado.
Más allá de la publicidad: Experiencia completa
Las empresas están aplicando neuromarketing no solo para anuncios, sino para:
Optimizar empaques y señalización
Medir la interacción en tiendas físicas
Ajustar interfaces digitales
Mejorar experiencias de usuario
Diseñar espacios sensoriales y entornos inmersivos
Plataformas como Affectiva y iMotions han facilitado el acceso a estas tecnologías, permitiendo que equipos creativos y de producto analicen reacciones reales sin interrumpir la experiencia del usuario.
A medida que esta práctica gana terreno, también crecen las conversaciones sobre ética y privacidad. Organismos como el World Economic Forum recomiendan establecer reglas claras sobre consentimiento, anonimización de datos y límites en el uso de señales emocionales. El objetivo es construir experiencias más humanas, no manipular decisiones de manera invasiva.
El neuromarketing aplicado se posiciona como una herramienta clave para el futuro del marketing en la región. Comprender cómo reaccionan las personas en tiempo real permitirá crear campañas más relevantes, auténticas y memorables, fortaleciendo la conexión emocional entre marcas y consumidores.





