La República de Panamá ha logrado un hito importante al ser eliminada de la lista de países de alto riesgo de la Unión Europea debido a deficiencias estratégicas en la prevención del blanqueo de capitales y financiamiento del terrorismo.
(M&T)-. Esta decisión, anunciada por la Comisión Europea, marca un paso significativo para Panamá y su economía. La evaluación realizada por la Comisión Europea, tras la salida de Panamá de la lista gris del Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI), reconoce los avances del país en materia de prevención de lavado de activos y financiamiento del terrorismo. Se destacan los esfuerzos para fortalecer el marco jurídico y normativo, así como la implementación efectiva de medidas para cumplir con los compromisos del plan de acción establecido por el GAFI.
Entre las medidas implementadas se encuentra la modificación de la normativa de prevención de blanqueo de capitales y financiamiento del terrorismo, la adopción del Registro Único de Beneficiarios Finales y la emisión de la Guía de Beneficiario Final. Estas acciones, junto con otras iniciativas, han contribuido al reconocimiento internacional de Panamá en cuanto a altos estándares de transparencia y lucha contra el crimen financiero.
La eliminación de Panamá de esta lista refleja el compromiso del país en la lucha contra el lavado de activos y el financiamiento del terrorismo, así como su capacidad para mantener estándares internacionales en materia financiera. Este logro no solo mejora la reputación internacional de Panamá, sino que también facilita las relaciones económicas y financieras internacionales del país.
Es importante destacar que este éxito es el resultado del trabajo conjunto entre varias entidades, incluyendo la Coordinación Nacional de Panamá en materia de prevención de lavado de activos y financiamiento del terrorismo, liderada por el Ministerio de Economía y Finanzas, así como el sector privado y la comunidad internacional.
En resumen, la eliminación de Panamá de la lista de alto riesgo de la Unión Europea es un paso significativo que demuestra el compromiso del país con la transparencia y la lucha contra el crimen financiero, así como su capacidad para mantenerse competitivo en la comunidad financiera internacional.