El concepto de "involución", que describe una competencia excesiva sin resultados reales, refleja la realidad que muchas pequeñas y medianas empresas (PYMEs) enfrentan hoy en día en diversas regiones.
Por: Por: Wady Johel Cerdas Tenorio
PhD. Ciencias Empresariales, IMBA-MBA, Ingeniero Industrial.
Licenciado en Derecho, Profesor Universitario. Conferencista Internacional.
Asesor, Consultor y Director Asociado y Conductor de Tips Empresariales (La Potente Radio TV).
(M&T)-. Esta dinámica, donde se compite intensamente pero sin avances significativos, se manifiesta de manera palpable en América Latina, donde las pymes luchan por sobrevivir en mercados saturados y altamente competitivos.
En múltiples países de la región, las pymes se enfrentan a desafíos similares, compitiendo no solo entre sí, sino también contra grandes corporaciones que dominan el mercado. Empresas emergentes en sectores como la tecnología, la alimentación y el comercio minorista a menudo se encuentran en una carrera por captar la atención de los consumidores, una carrera que muchas veces está destinada al fracaso debido a la asimetría en recursos y capacidades.
Un caso que ejemplifica esta situación es el de una empresa en México que decidió lanzar una plataforma de venta de productos orgánicos en línea. A pesar de sus esfuerzos por diferenciarse mediante la oferta de productos locales y sostenibles, se encontró en desventaja frente a gigantes del comercio electrónico con presencia internacional.
La presión para mantener precios competitivos y la falta de visibilidad en un mercado dominado por grandes actores llevaron a esta empresa a una crisis financiera. En menos de dos años, los fundadores, enfrentando pérdidas significativas, tomaron la dolorosa decisión de cerrar el negocio.
Este fenómeno se repite en diversas economías de la región. Por ejemplo, en Brasil, una startup que desarrolló una aplicación innovadora para la gestión de finanzas personales no logró captar la suficiente base de usuarios para sostener su operación, a pesar de tener un producto superior en funcionalidad.
La falta de acceso a recursos comparables a los de sus competidores más establecidos y el agotador esfuerzo por mantenerse relevante en un mercado saturado llevaron a esta empresa a cerrar después de varios intentos fallidos de asegurar financiamiento.
La situación de involución en las pymes no solo es resultado de una competencia desigual o de la escasez de recursos, sino también de un entorno que favorece a las grandes corporaciones. Estas empresas, con acceso a financiamiento, infraestructura avanzada y extensas redes de distribución, logran establecer un dominio casi total del mercado, dejando poco espacio para que las pymes prosperen. Además, la presión constante por innovar y adaptarse a las demandas del mercado crea un ambiente agotador para los emprendedores, quienes a menudo sacrifican su bienestar personal para mantener sus negocios en marcha.
Sin embargo, no todo está perdido para las pymes en América Latina. Existen ejemplos de empresas que han logrado superar el ciclo de la involución al enfocarse en nichos específicos y aprovechar las oportunidades de la digitalización. Algunas compañías en el sector agrícola, por ejemplo, han encontrado éxito exportando productos orgánicos a mercados internacionales.
De igual manera, startups tecnológicas que se especializan en soluciones de software para industrias locales han demostrado que es posible no solo sobrevivir, sino también prosperar, incluso en un entorno tan competitivo.
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