Los gemelos digitales ya están optimizando operaciones reales

La virtualización de procesos ya no es exclusiva de la industria 4.0 o las grandes multinacionales. Hoy, gracias a la democratización de tecnologías como el IoT, la analítica en tiempo real y la inteligencia artificial, los gemelos digitales (digital twins) comienzan a ganar protagonismo en empresas de América Latina.

(M&T)–. Esta herramienta permite crear réplicas virtuales de procesos, infraestructuras o productos físicos para simular escenarios, predecir fallos y optimizar decisiones.

El concepto no es nuevo: nació en la NASA para simular condiciones de vuelo sin exponer recursos reales. Pero hoy se aplica a operaciones logísticas, monitoreo de fábricas, construcción de edificios inteligentes o mantenimiento predictivo en infraestructura pública. Todo lo que puede medirse, puede modelarse digitalmente, y eso abre la puerta a una nueva era de eficiencia operacional.

Según un reporte de Gartner, para 2027 más del 40 % de las grandes empresas del mundo usarán gemelos digitales para mejorar la eficiencia y reducir costos en sus operaciones físicas. Ya se está viendo en plantas manufactureras, cadenas de suministro y hasta en ciudades que implementan gemelos urbanos para gestionar servicios públicos y movilidad.

En América Latina, empresas del sector logístico están utilizando esta tecnología para anticipar bloqueos, optimizar rutas y modelar escenarios de demanda en tiempo real. 

En construcción, algunos desarrolladores han comenzado a usar gemelos digitales para prever fallos estructurales o calcular la eficiencia energética de un edificio antes de colocarse la primera piedra. Y en manufactura, el modelo permite simular procesos antes de aplicarlos, reduciendo errores y desperdicio.

Además, la combinación de gemelos digitales con sensores IoT y sistemas de IA permite generar una visión integrada y dinámica de activos físicos, que se actualiza en tiempo real. Esto no solo acelera la toma de decisiones, sino que permite realizar mantenimiento preventivo en vez de reactivo, lo cual representa un ahorro sustancial a mediano plazo.

El reto está en la inversión inicial y la integración con sistemas ya existentes. Sin embargo, el retorno en eficiencia, calidad y toma de decisiones inteligentes hace que cada vez más empresas vean en esta tecnología una apuesta estratégica.