Claves para fortalecer la aviación latinoamericana en la próxima década
- M&T
- hace 22 minutos
- 2 Min. de lectura
¿Puede la aviación convertirse en el motor económico que América Latina necesita para despegar con fuerza en la próxima década? En una región marcada por distancias amplias, contrastes económicos y desafíos estructurales, el transporte aéreo se consolida como un pilar de conexión, desarrollo y esperanza.

(M&T)-. La industria no solo transporta pasajeros; transporta oportunidades, inversión y progreso. Según datos del sector, en agosto de 2025 el tráfico aéreo en América Latina y el Caribe alcanzó los 40,7 millones de pasajeros, un incremento interanual del 4,3%, impulsado principalmente por los mercados domésticos de Brasil, Argentina y Perú, que representaron más de la mitad del crecimiento. Este repunte muestra un cambio significativo: los latinoamericanos están volviendo a volar dentro de su propio continente, fortaleciendo la conectividad regional y la recuperación del turismo y los negocios.
Durante el ALTA AGM & Airline Leaders Forum, los líderes de la industria coincidieron en que el éxito de la aviación ya no se mide únicamente por el número de pasajeros o rutas, sino por la capacidad de adaptación e innovación frente a un entorno económico cambiante. Sin embargo, los retos persisten: inestabilidad política, falta de planificación y marcos regulatorios poco coherentes siguen frenando el desarrollo del sector. El nuevo aeropuerto de Lima, finalizado tras décadas de retrasos y 18 ministros de transporte, refleja tanto los avances como la necesidad de institucionalidad y continuidad en las políticas públicas.
A estas complejidades se suman impuestos, regulaciones ambientales y altos costos operativos que pueden desincentivar la demanda. En un contexto donde el promedio de viajes en la región es de 0,65 por habitante al año, frente a más de 5 en Europa, cada barrera importa. Los costos dolarizados, el precio del combustible y la escasez de aeronaves aumentan la presión, mientras que la falta de talento especializado limita la capacidad operativa.
No obstante, las oportunidades son evidentes. El tráfico aéreo regional crece por encima del promedio mundial y podría duplicarse en la próxima década. A pesar de que el ingreso promedio por pasajero en América Latina ronda los US$3.40, frente a los US$7.20 globales, el potencial de crecimiento es enorme si se apuesta por eficiencia, digitalización y análisis de datos como motores de competitividad.
La clave estará en impulsar políticas coherentes y sostenibles, que promuevan inversiones en infraestructura, incentivos para la innovación verde y estrategias regionales integradas que fomenten la conectividad y reduzcan las desigualdades. Porque en América Latina, la aviación no es un lujo: es una herramienta estratégica para descentralizar oportunidades y unir economías.
Cada vuelo que despega representa más que un trayecto; es el reflejo de un continente que, pese a las turbulencias, sigue mirando al cielo con determinación. La resiliencia está comprobada; ahora el desafío es transformar esa fuerza en un crecimiento sostenido, inclusivo y competitivo para toda la región.





