Con más de 100 edificios y proyectos en Guatemala y El Salvador, la constructora ha revolucionado el sector inmobiliario con la fórmula de la excelencia.
(M&T)-. QualiCons nace en el año 2002 con la visión de ser una empresa constructora en Guatemala con crecimiento sostenible y fue en el 2016 cuando empezó a operar en El Salvador como parte de su visión de expansión a nivel regional.
Durante su trayectoria, la compañía ha incursionado en la construcción de proyectos con distintos alcances, entre ellos: vivienda vertical, vivienda en serie, oficinas verticales, complejos industriales, estructura principal, obra gris, administrador general de obra, proyectos llave en mano y acabados finales.
Así, QualiCons ha tenido un impacto positivo durante su trayectoria, apoyando a desarrolladores y empresas en todas las industrias para completar sus proyectos y alcanzar sus metas con excelencia en ambos países.
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“Creemos que la confianza que hemos generado en nuestros clientes después de más de 20 años se ve reflejada en más de 100 proyectos construidos entre Guatemala y El Salvador, los cuales suman más de 2,000,000 metros de construcción. Estamos convencidos que esta confianza ha sido construida ofreciendo certeza, excelencia en ejecución e ingeniería de valor”, asegura Vicente Jo, Director de Nuevos Negocios.
¿Cómo está la industria de la construcción en Guatemala y El Salvador?
Uno de los principales retos que el sector inmobiliario ha sufrido derivado del contexto económico y político-social de la región es la volatilidad y el alza de costos de construcción que pueden representar precios elevados de ventas.
Dentro de su visión y estrategia, QualiCons ha buscado soluciones innovadoras para poder construir proyectos más eficientes en costos innovando a través de sistemas estructurales y constructivos.
“Tanto El Salvador como Guatemala tienen mucha demanda de unidades habitacionales. En San Salvador y ciertas cabeceras se está experimentando un auge de desarrollo de vivienda vertical, ya que en el país aún hay tierra disponible para esto. En cuanto a las cabeceras, por ejemplo, está San Miguel, un área que es polo de desarrollo importante para el país, en el que hay anclas comerciales y desarrollo de servicios que impulsan el tema. A nivel construcción, El Salvador es un país que ha tenido mucho auge en los últimos años, inclusive en época de pandemia”, señala Jo.
Mientras tanto, en Guatemala lo que se ve desde hace un par de años es una fuerte tendencia de producto industrial, manifiesta Rafael Monzón, CEO.
“Desde 10 años atrás el segmento residencial ha tenido un auge muy fuerte, y ese crecimiento no se ha detenido e incluso, en ciertos segmentos de vivienda ya se experimenta una saturación de oferta. Por el contrario, el producto industrial havenido incrementándose, sobre todo en el área al sur de la capital, como Villa Nueva y Amatitlán”, indica. Por otro lado, el segmento de las oficinas ha sido golpeado en ambos países, aunque poco a poco da luces de recuperación. “En Guatemala se ha visto una reducción drástica en la cantidad de metros cuadrados de oficinas que se han introducido al mercado, incluso, hay proyectos que fueron concebidos para el uso de oficinas y éste se tuvo que cambiar en el camino, todo debido a la pandemia. Sin embargo, la tendencia va encaminada a que regrese el uso del espacio de oficinas”, sostiene Monzón.
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